Entre la ciudad y el bosque

Utilizare a Eowyn,el roll es publico.
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Estaba en uno de los callejones de la ciudad de Canada.Estaba durmiendo placitamente,hasta que oi a varios camaradas mios,huyendo de algo.Abri los ojos y les mire y les dije:
-Que estais haciendo,cobardes?!
-Unos humanos vienen a cogernos!!-dijo uno de ellos
Me levante y me dirigi hacia fuera y vi a los humanos.Era perreros.Los peores seres humanos que tenemos,eran dos,pero,eran faciles de atacar.Me fui corriendo hacia las afueras de la ciudad.Vi que los dos humanos me perseguian.Al fin,estaban en mi trampa.Me escondi y me dirigi hacia el que tenia un arma y lo mate.Mas tarde mate a su compañero.Oi ruidos entre los matorrales y dije:
-Quien esta ahi?!

Estaba escondido, obserbando a esa perra, su forma de pelear me sorprendió, si que era fuerte y agil.
Escuché su vos y decidí obedeserla si no queria meterme en problemas, así que salí de mi escondite entre los matorrales y dije:
-Soy solo yo, me llamo Dingo, solo te observaba-
Y la miré a los ojos mostrando firmesa y sin mostrar ningun gesto de temor.

-Se nota que no me tienes miedo.Soy Eowyn,lider de una manada de perros cobardes!Me ire de la ciudad y vivire con otra manada de lobos.-le dije a Dingo
Cogi un trozo de los humanos y me la comi,era sabrosamente rica.
-Se que fuiste un luchador de peleas.Pero,a mi no me ganaras.-le dije
Tire el trozo del brazo y me lami el hocico.
-Aunque no te creas,fui la que mate a mil hombres,y mate a un oso negro,de 5 metros de alto y 700 kg.Si no me crees,ve a la ciudad y preguntales,que Eowyn,si lucho contra un oso o mate mil hombres.Adios!-le dije
Y me fui del lugar,para crear mi manada.

La seguí silenciosamente.
Pero en un momentó me tropesé con un pozo que había en el suelo e hice mucho ruido al caer.

Oi un ruido y corri hacia el camino de donde me fui y vi a Dingo que se cayo a un pozo.
''Cze!Sera torpe!Bueno.''-pense
Le mire y no vi que estaba herido y dije:
-Te voy a sacarte!!
Salte hacia el pozo,le cogi por el lomo y me fui de pared en pared hasta llegar afuera.Le deje al suelo y me fui corriendo para que no me siguiera.

No alcanzé a agradecerle.
No me importó, y la vi verse a lo lejos.
Sabia que se iba a la ciudad, así que me fui lento caminado.
Nesecitaba su ayuda.

Volvi a la ciudad.Ya que tenia que comer algo y tendria que robar a los humanos.No me importaba,ya que odiaba los humanos por que me hizieron daño en el ojo izquierdo.Me voltee y vi a Dingo,al final,cansada de que me siguiera,le dije:
-Ven conmigo,pero,no hagas nada extraño en la ciudad.Iremos a la carniceria a robar carne.

-Gracias, pero.. ¿robar?, nunca hice nada así-
Pero la seguí a donde ella iba.

-Novato,si vives en la ciudad,tienes que saber tres cosas:primero proteger tu territorio,segundo ganar a los intrusos y tercero,robar las comidas de los humanos.-le dije a Dingo
Dingo,tendria que entrenar a robar si queria vivir en la ciudad.Llegamos al destino,se estaba anocheciendo,y no estaba el dependiente de la carniceria.Entre primero para que el novato no haria ninguna sospecha.Cogi un gran trozo de carne y sali rapidamente del lugar con el novato.Llegamos a mi territorio.Toda la manada estaba preocupada por mi.El general,Shadow,era mi tio,me cuido desde que llegamos a la ciudad.
-Eowyn...Como siempre quieres robar a los humanos.Y este chico?-pregunto mi tio

No sabia que responder, así que me quedé cayado esperando que ella respondiera.

-Se llama Dngo.Me lo encontre por el bosque.Y una cosa,antes de irme,esta mañana me querias decir algo,¿de que se trata?-le respondi
-Tenemos que irnos de la ciudad,ya que el invierno esta llegando,los de la perrerra nos cogeran y nos sacrificaran.-me respondio

Hola, me gustaría unirme, usuaré a Blas.
Roll on:
Por fin llegamos a la ciudad, habíamos escapado de Nome por los pelos y las heridas seguían doliéndome.
-Blas, ¿estás bien?- me preguntó Rayo.
-Tranquilo, pequeño, estoy bien.- le lamí la cabecita para tranquilarle.-Vamos.
Caminamos un buen rato hasta que llegamos a una calle, al perecer poco frecuentada.
-Tengo hambre- se quejó el cachorrito.
-Espere aquí- le ordené, escondiéndolo tras unas cajas de cartón.
Me fui hasta un cubo de basura y cogí un trozo de pollo, cuando fui a dárselo a Rayo, oí una voz detrás de mí.
-Oye tú, ¿quién te crees que eres para robarme mi comida?- me dijo furioso un perro enorme, un Doberman posiblemente.
-Oh, lo siento. Sólo quería...- pero antes de que acabara la frase, el perro se lanzó sobre mí.
Por suerte, ese truco ya lo conocía y pude deshacerme de él.
-¿Cómo has...?- me dijo.
-Ya he visto eso, no me impresionas.
-Hijo de...
Volvió a morderme, esta vez en la herida del pecho, haciéndome mucho daño.
-¡Aaaaaahhhhhh!- grité.

Oi un grito y me fui hacia el ruido y vi a Marc luchando contra un perro.Y les dije a los dos:
-Parad de una vez!!
Marc,le lanco a uno de los cubos,salte desde un edificio y me fui hacia Marc y le cogi por el cuello y le dije:
-Idiota!Atacas a los desconocidos sin mi permiso!Quieres morir como mate a cien perros que me traicionaron!!
-No!!Le ataque porque me iba a robar la comida!!-me respondio
Me acerque hacia el perro y le dije:
-Quien eres?!

Me erguí como pude y miré a la hembra que estaba delante, parecía de fiar, de hecho me había salvado la vida.
-Soy Blas, hijo de Tempestad y de Tormenta. Soy un perro-lobo- le contesté, aunque pensé que me arriesgaba un poco al confesarle que era un mestizo, no era algo que solía agradar a los perros que me hablaban.
Miré hacia los lados y olfateé, ¿y Rayo? Su olor seguía ahí, pero no le escuchaba.
-¡Oh, no!- grité asustado.

Grito el perro-lobo y le dije:
-Vete de aqui.Aqui no queremos mas extranjeros!Y tu Marc,vas a ver lo que te espera!

Obedecí de inmediato a la perra, además tenía que encontrar a Rayo.
-No lo encontrarás- dijo con voz siniestra Marc, el doberman.
-¿qué?- le pregunté confuso.
-vi cómo se lo llevaba uno de los perros solitarios.
-¿dónde vive ese perro?
-No te lo pienso decir- me contestó riéndose Marc.
-Hijo de...- gruñí y le miré amenazadoramente.

Oi lo que dijo Marc y me lance hacia el y le dije:
-Dile donde esta el cachorro,o si no,te quitare los huevos!
-Os lo dire!!-grito

-¿Dónde está?- le pregunté con voz ronca.
-Está... está cerca de la fábrica abandonada de coches-confesó asustado.
En cuanto me lo dijo, salí corriendo, tenía que encontrar a mi 'hermanito', era el único que me había querido en Nome, a pesar de mi sangre de lobo.
-Espera, Rayo, ya voy por ti- pensé.
Pero me detuve, había un problema: No sabía dónde estaba esa fábrica, y el olor del cachorro había desaparecido.
-¡Mierda!- dije.

Le lance a uno de los cubos de basura me acerque hacia el y le arranque los huevos.Grito y le cogi por el cuello y me lo lleve hasta llegar al perro-lobo y solte a Marc.
-Se donde esta la fabrica de coches.Nos llevaremos a este traidor y lo enterrare mientras tu,matas al secuestrador.
Cogi otra vez al traidor y me fui la primera.Llegamos a la fabrica y hice un agujero grande y lance al doberman.Le enterre y fui con el perro-lobo.

Me impresionó las estrictas reglas que caían sobre los traidores y me entró algo de miedo, pero no, no podía echarme atrás, debía salvar a Rayo. Cuando la perra se puso a mi lado le di las gracias y ambos entramos en la fábrica. Estaba oscura y silenciosa, daba escalofríos. De pronto, oímos un ruido.
-¡Blas, soc...!- era la voz de mi 'hermano', sin duda.
-¡Cállate, canijo malnacido!- dijo una voz grave.
-¡Muéstrate, cabrón!- le grité a secuestrador.

Recordaba esa voz,y salio a la luz un perro con las orejas a mitad y recordaba quien era.
-Scar!Debia de suponerlo!-le grite
-Vaya,vaya.Cuanto tiempo!-dijo
Y lanzo al pequeño cachorro y me lance hacia el cachorro y le cogi por el lomo.Toque a tierra y le deje en el suelo y le grite:
-Quieres ver a tu amigo el ''traidor''?Porque cuando te coga,te quitare los huevos y me comere tu cerebro!

Gracias a la hembra, Rayo ya estaba a salvo, que corrió hacia mí.
-¡Blas! Tenía mucho miedo- me dijo llorando el pequeño.
-Tranquilo, ya estás a salvo- le consolé lamiéndolo.
-¡En cuanto acabe con vosotros me divertiré con ese niñato todo lo quiera!- dijo Scar, riéndose cruelmente.
-¡Eso ni de coña!- contesté, saltando hacia el perro y mordiéndole el pecho.
Pero Scar ,e mordió el lomo, justo donde tenía una franja que me había hecho Marc, y me tiró al suelo.
-Ca... cabrón.
Rayo lloraba de miedo.

Me fui hacia Scar y le cogi por el cuello.Me mordio en el lomo,pero,no me importaba.Le golpee al suelo la cabeza.Me solto y le cogi por el cuello y le tape la nariz para que muriera de ahogamiento.Y le dije cogiendolo:
-Cuando me muera,nos veremos en el Infierno,pero antes,tendras que morir!!

Mientras Scar moría, le tapé los ojos a Rayo, no quería que viese algo así. Yo también aparté la vista, no me gustaba ver morir a nadie, aunque fuese peor que un dolor de muelas.

Despues de matarle.Quite la piel del estomago y me comi los inestinos.Y dije:
-Enseñaos a matar de una vez para vivir y de comerse a los traidores como estos!